Vuelo demorado.

(Nota introductoria, quien puede dormir en estos asientos de la terminal aerea, se ha ganado toda mi admiración.)

No me gusta viajar en temporada alta, los aeropuertos y terminales de autobuses siempre están llenos, los viajes demorados (o en el peor de los casos, cancelados); sin embargo las responsabilidades de “una persona productiva¨ me impiden convivir con mi familia tanto como quisiera.

Y si viajar cuando todo mundo lo hace no es de mi agrado, viajar en la festividad más ridícula y que más odio (entiéndase, navidad) aumenta mi mal humor, pero la familia es la familia, y es así como repentinamente te encuentras varado en la sala de abordar de un aeropuerto provinciano.
Para aliviar un poco la tensión, nada como darse una vuelta por las redes sociales desde el celular… así que sirva este post para compartir con ustedes la neurosis de mis “tuits” desde el Aeropuerto Internacional de Monterrey cuando el vuelo a Ciudad de México se retrasó dos horas.

Desde mi twitter @MikeEnElDivan:

10:34 pm. En la sala de abordar... Vuelo con dos horas de retraso... No puedo salir a fumar FUCK!!

10:40 pm. Y luego Facebook Móvil no esta jalando... Tuiteros... Help me!

10:43 pm. Nunca había visto una fila tan larga en un Subway... Debe tener ventajas ser el único negocio abierto en un mercado cautivo...

10:47 pm. Retweet a @ChumelTorres. “Doy gracias al gran cineasta Luis Buñuel por la creación de los buñuelos.” (Al momento me resultó divertidísimo, ahora no estoy tan seguro)

10:50 pm. Retweet a @Tabaco_. “ Las mejores decisiones de la vida son aquellas en las que terminas diciendo 'Chingue su madre, lo haré de todas formas'.”

11: 03 La terminal c del aeropuerto de Mty de noche es extremadamente aburrida. A leer!

11:10 pm. A todisima madre los empleados del aeropuerto me acompañaron a fumar!

Después de un par de cigarrillos la tranquilidad volvió, así que hice lo más sensato que se puede hacer en esta situación. Sacar mi lap top y actualizar mi blog.

Este año evitaré enviar saludos, felicitaciones y buenos deseos. Evitaré poner una lista de propósitos, metas y objetivos. Me limitaré a decirles queridos (y escasos) lectores. Muchas gracias por seguir mis alucines este año, y por lo único que debemos preocuparnos hoy y a futuro es en ser felices. Hasta otro leer.

Monterrey, NL. 23 de diciembre de 2011.